Mi primera boda como fotógrafo de bodas en Madrid la recuerdo con especial cariño. No solo porque fuera la primera que ya conlleva una responsabilidad añadida, sino por lo que allí ocurrió.
Por aquel entonces y para que os situéis daba igual de dónde fueras, porque lo realmente importante era contratar a un Fotógrafo de Bodas en Madrid así que mi primer cliente para mayor satisfacción fue un importante empresario de la época afincado en Guadalajara.
Ya.., ya se que os estaréis preguntando si no había Fotógrafos de bodas en Guadalajara que imagino que si, pero como os comento, el contratar a un Fotógrafo de Madrid daba caché.
Ahora cualquiera lleva una cámara de fotos y es capaz de hacerle la Fotografía de Boda a cualquier amigo o primo que se lo pida ( lo de primo no me refiero a su familiar sino a cualquier primo que sea tan ingenuo de pedir a alguien que no es profesional de la Fotografía de Bodas, que le haga lo que será uno de los mayores recuerdos de su vida después del dineral que te gastas).
No, en aquellos años no era tan sencillo ya que, o realmente te habías empapado no solo el manual de la cámara y del flash sino que debías haber tenido el privilegio de aprender de los mejores y en ese aspecto si es parecido a ahora ya que trabajabas gratis para poder absorber esos conocimientos que hacen que tus fotografías sean diferentes.
Volviendo al hilo que al final me pierdo os describo el maravilloso día que toda Pareja de Novios ansía y espera que sea el día más maravilloso de sus vidas.
Dia de la Boda
Perdonar que no diga ni la Iglesia, tampoco me acuerdo del nombre para que nos vamos a engañar.
Allá que me planto con mi compañero. Yo con mi Canon A1 de carrete de 35mm con aquel flash de brazo Metz y dos baterías por si acaso y mi compañero el Videógrafo de Bodas con una pedazo cámara que pesaba un quintal, (ríete tu de las que llevan ahora las televisiones).
También llevaba un magnetoscopio al hombro que era donde iba metida la cinta VHS, si habéis leído bien, VHS ( muchos de los que estaréis leyendo esto no habéis conocido aquellas cintas ni los aparatos en los que se reproducían).
El caso es que entre lo que pesaba lo que llevábamos y poner bien los cables de la cámara de video al magneto ya era toda una experiencia el que saliera todo a la primera, pero oye salía, no como ahora con las digitales, que te meten cada susto que para qué.
Momento clave de la Boda:
“ Fulanita..(obviamente no voy a poner sus nombres que no estoy para demandas a toro pasado, ya que os recuerdo que por aquel entonces no existían móviles que hubieran inmortalizado tan preciado espectáculo, de haber sido así estaría corriendo como la pólvora por todas las redes sociales habidas y por haber).., prosigo..
” Fulanita, quieres a Menganito como legítimo esposo y prometes serle fiel (jajajajaja) que gracioso el cura, esa frase cada vez que la oigo en las bodas eclesiásticas me viene ésta a la memoria..
Y la Fulanita dice muy entregada “ SI”, así, un si grande que debido a los micros de las Iglesias y a su estructura acústica para repartir el sonido hacen que sea más convincente aún.
“Menganito.., quieres a Fulanita como legítima esposa y prometes serle fiel..bla, bla, bla”
-NO.
Hasta aquí bien, no pasa nada.., muchos novios se suelen poner nerviosos al llegar este momento y se equivocan así que el párroco como estos lapsus ya los ha vivido y sabe que son producto de la situación vuelve con esa característica paciencia que Dios le da a los curas (bueno no a todos), a repetir de nuevo si quieres a la Fulanita..
-NO
Uff, esto ya no son nervios. Yo si que empiezo a ponerme nerviosa, es normal, mi inexperiencia me delata, como os dije es mi primera vez, me estoy estrenando como Fotógrafo de Bodas y encima de Madrid, ¡no me puede estar pasando esto por favor!..
La novia le dice algo así como: Venga cari, ¿que broma es esta?
Ja, ja, broma.. si en ese momento ella hubiera sabido lo que se la venía encima hubiera estado calladita como buena mujer, que era un preciado calificativo de la época (algo impensable a día de hoy claro está).
-NO porque llevas tanto tiempo (no me acuerdo cuanto dijo), LIADA con ese ( y señala a un tipo que estaba sentado en el tercer banco de la Iglesia con su mujer y sus hijos al lado)
Silencio sepulcral. Nadie se atreve a decir nada. La Fulanita menos, alguien que es capaz de llegar hasta ahí es porque tiene pruebas y si las saca allí quizá la que se lió en Puerto Hurraco hubiera quedado en un juego de niños. Así que el Menganito con toda su sangre fría ( esto ya lo llevaba más que preparado), se acercó a mi compañero y a mi (que yo debía estar en estado de shock aún), nos pidió los carretes y la cinta de video, sacó un fajo de billetes, nos pagó y dijo en voz alta:
“ Por favor, MIS INVITADOS pueden ir al restaurante ya que tengo que pagarlo igual y vamos a celebrarlo”
Y ese fue mi estreno como Fotógrafo de Bodas en Madrid o Fotógrafa de Bodas que ahora ya no se ni cómo ponerlo debido a la inclusión esta del lenguaje pero en definitiva nunca llegaré a saber si como se decía, aquellas fotos hubieran sido fotones, porque no se olviden, que lo realmente importante es que fueras uno de los Mejores Fotógrafos de bodas de Madrid o Fotógrafas de bodas de Madrid.
Si quieres que participe de la felicidad de tu día especial, no dudes en ponerte en contacto conmigo aquí.
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